La hidrocefalia es una condición médica que afecta a niños en todo el mundo. Se caracteriza por la acumulación excesiva de líquido cefalorraquídeo en los ventrículos del cerebro, lo que puede generar presión y daño en el tejido cerebral.
¿Qué causa la hidrocefalia en niños?
La hidrocefalia puede ser congénita, lo que significa que el niño nace con ella, o adquirida, desarrollándose después del nacimiento debido a una lesión o enfermedad. Algunas de las causas más comunes incluyen:
Obstrucción del flujo de líquido cefalorraquídeo: Puede ser causada por malformaciones congénitas, como el estrechamiento de los conductos o el bloqueo en la salida del líquido cefalorraquídeo del cerebro.
Hemorragia cerebral: Puede ocurrir en bebés prematuros o como resultado de un traumatismo craneal.
Infecciones: Algunas infecciones, como la meningitis, pueden provocar inflamación y obstrucción en los conductos cerebrales.
Síntomas de la hidrocefalia en niños
Es importante estar atentos a los signos y síntomas de la hidrocefalia en los niños, ya que el diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado pueden marcar una gran diferencia en su desarrollo. Algunos de los síntomas comunes incluyen:
Cabeza de tamaño anormalmente grande o en crecimiento rápido.
Fontanelas abultadas (las áreas blandas en la parte superior de la cabeza de los bebés).
Cambios en la visión, como dificultad para enfocar o estrabismo.
Dolor de cabeza intenso y persistente.
Náuseas y vómitos.
Cambios en el comportamiento, como irritabilidad o somnolencia excesiva.
Problemas de equilibrio y coordinación.
Manejo de la hidrocefalia en niños
El tratamiento de la hidrocefalia en niños generalmente implica la colocación de una derivación o shunt cerebral. Esta es una pequeña tubería que se coloca quirúrgicamente para drenar el exceso de líquido cefalorraquídeo hacia otra parte del cuerpo, como el abdomen, donde se puede absorber de manera adecuada.
Además del tratamiento quirúrgico, es importante contar con un equipo multidisciplinario que incluya neurólogos, neurocirujanos, terapeutas ocupacionales, fisioterapeutas y logopedas. Estos profesionales trabajarán en conjunto para brindar el mejor cuidado y apoyo posible al niño.
TOi Robot ha comprobado ser un auxiliar efectivo en las terapias y rehabilitación para el tratamiento de la hidrocefalia ya que puede tratar el movimiento fino, psicomotricidad, equilibrio y la coordinación ojo mano así como el equilibrio y postura, elementos que pueden verse afectados por la hidrocefalia. Además, otorga a los terapeutas la oportunidad de crear sesiones a medida gracias a que las rutinas y actividades son completamente graduables y medibles.
Es fundamental que los padres y cuidadores estén informados y tengan acceso a recursos educativos y de apoyo. Organizaciones especializadas y grupos de apoyo pueden proporcionar información valiosa, compartir experiencias y brindar orientación para enfrentar los desafíos asociados con la hidrocefalia.